20/2/11

Ley de vida, es vivir


Recuerda siempre esto: hay algo que tú sabes y que sólo tú puedes saber. No permitas jamás, bajo ningún concepto o pretexto, que tus sentimientos sean puestos en tela de juicio, ni medidos, ni supuestos por nadie. No hay terapeuta en este mundo que conozca tus sentimientos mejor que tú, así que ámalos, ya que nadie puede hacerlo por ti, excepto tú. No dejes que te supongan. No dejes que te diagnostiquen, o te etiqueten, y en caso de que lo hicieran, respeta esa visión y márchate con cortesía sin permitir que te aflija, te condicione o te anule.

Recuerda que nada es definitivo: hoy eres tú mismo y mañana también lo serás, aunque nunca igual a hoy. Lo bonito de ser persona es que puedes vivir un día a la vez sabiendo que cada minuto es único e irrepetible.Y aunque pueda sonar a frase hecha, muchos son los que la pronuncian y pocos los que la ponen en práctica cuando las cosas van mal. Sabiendo esto -entre otras cosas- impedirás que otros te condicionen. Valora tu experiencia por encima de las palabras, las academias y los gurúes. Que tú eres tu propio maestro no es ninguna novedad, lo que sí es una novedad es creérselo.

Para terminar, la conocida y siempre didáctica sentencia del maestro Fritz Pearls, el padre de la Gestaldt, que reza:

Yo hago lo mío y tú haces lo tuyo.
No estoy en este mundo para llenar tus expectativas,
y tú no estás en este mundo para llenar las mías.
Tú eres tú y yo soy yo.
Y si por casualidad nos encontramos es hermoso.
Si no, no puede remediarse.